Aunque, como él mismo dice, ya no es el más joven, eso no es motivo para que Roland Aicher se tome las cosas con calma o se exija menos. Cuando no trabaja como quiropráctico, ofrece entrenamiento personal a través de su empresa RAPT (en inglés: entusiasta, también las siglas de Roland Aicher Personal Training), supervisa peleas de Muay Thai y MMA como cutman o se esfuerza al límite en cada uno de sus entrenamientos. Con ello demuestra de forma impresionante que el rendimiento deportivo y la forma física no son en absoluto una cuestión de edad.

¿Cómo describirías tu carrera deportiva desde el principio?

Roland Aicher: Empecé con judo, luego BMX, y en algún momento me metí en el taekwondo, cuando tenía 16 años, también tuve peleas. Desde los 18 o 19 años descubrí los deportes extremos, el kayak de aguas bravas, el barranquismo, la escalada, lo hice todo y luego me convertí en profesora de estas disciplinas. Al principio siempre quise hacer Muay Thai, pero lamentablemente en aquel momento no había ningún estudio en Salzburgo. Cuando tenía 25 años, tuve la suerte de que en un club de boxeo me ofrecieran boxeo tailandés. En aquel entonces, siempre teníamos que intentar desesperadamente reunir al menos a cinco personas antes de cada entrenamiento, de lo contrario no se habría realizado. Como resultado, entrené durante mucho tiempo primero en Jiu Jiutsu, luego en MMA, pero mi corazón pertenece y todavía pertenece al Muay Thai.

¿Cómo entrenas?

Roland Aicher: Entreno seis días a la semana, mucha fuerza, resistencia, ejercicios combinados, fitness funcional. Mi objetivo es entrenar de la forma más holística posible, porque sólo así se puede conseguir un fitness integral. Estructuro mi entrenamiento de manera diferente cada vez para desafiarme de manera diferente; nunca entreno exactamente de la misma manera dos veces.

 

 

¿Cómo compaginas eso con tu trabajo?

Roland Aicher: Cuando doy entrenamiento personal, también hago parte del entrenamiento yo mismo y ya estoy en el club. De lo contrario, después del trabajo. La quiropráctica es casi una especie de entrenamiento.

¿Cómo llegaste a esto?

Roland Aicher: Inmediatamente después de mi aprendizaje, comencé con mi licencia de instructor, asistí a la academia deportiva, realicé uno de los primeros seminarios de pesas rusas cuando aún estaba emergiendo y seguí educándome en esta dirección y en el fitness funcional. Todavía lo hago hoy e intento mejorar mis habilidades año tras año.

Llegué a la quiropráctica a través de mi formación en masaje terapéutico.

 

 

En lo que respecta al entrenamiento personal, al principio impartí principalmente cursos en grupo, pero me resultó bastante difícil lidiar con la motivación casi inexistente de muchos participantes, por lo que pasé al entrenamiento personal.

Al principio, debido a mi estrecha conexión con esto, entrenaba principalmente a artistas marciales, habiendo trabajado ya con Ruben Wolff y otros luchadores de gran éxito. Con el tiempo comencé a conocer deportistas de otras disciplinas, como por ejemplo: B. Apoyó a Tina Schiffer para lograr sus objetivos.

¿Y cómo conseguiste tu trabajo como cutman?

Roland Aicher: Un organizador de peleas me informó sobre un seminario sobre entrenamiento de cutman y quedé inmediatamente enganchado. Me encanta esta actividad porque me da la oportunidad de estar activo dentro y alrededor del ring, directamente en la pelea, aunque desafortunadamente ya soy un poco mayor para pelear solo.

¿Cuál considerarías que ha sido tu mayor logro hasta la fecha?

Roland Aicher: Es difícil decirlo, logré todo lo que quería lograr, incluso si otros dijeran que no podría hacerlo. Esto me produce una satisfacción interior, sin volverme filosófico. Esto también me hace darme cuenta de lo que puedo lograr si realmente lo quiero y trabajo duro para lograrlo.

Y tu mayor Ti¿ef?

Roland Aicher: Para un deportista las lesiones siempre son un revés y representan una especie de derrota porque te frenan. En consecuencia, esto era algo que tenía que superar cada vez. Entonces, por ejemplo. B. después de que me rompí el peroné, cuando los médicos me dijeron que probablemente nunca más podría volver a entrenar adecuadamente. Después de una semana volví a montar en bicicleta y luché para recuperarme. Exactamente lo mismo después de mi operación de cadera, gracias a la cual me entrené para estar sano, de modo que ahora vuelvo a ser tan resistente como si casi nunca hubiera existido. Para mí la vida se caracteriza por altibajos y eso también es importante. Todo lo demás está paralizado. Crezco a partir de los reveses o de las crisis, salgo más fuerte de ellas y aprendo, hay que aprender a caer conscientemente, luego se le pierde el miedo. El fracaso es parte de la vida. Sin embargo, debes aprender de ello y seguir adelante, aunque al principio te resulte difícil.

 

 

¿Cómo te motivas?

Roland Aicher: No tengo que motivarme para hacer ejercicio de inmediato. Para mí el deporte forma parte del cuidado personal diario y de la limpieza interna, algo imprescindible como ducharse o lavarse los dientes.

Al mismo tiempo, representa un examen intensivo de uno mismo, a través del cual se llega a conocer cada vez mejor.

¿Cómo conseguiste la máscara de entrenamiento Phantom ?

Roland Aicher: He estado en estrecho contacto con Phantom Athletics a través de las artes marciales durante mucho tiempo. Cuando surgió la idea de desarrollar la máscara de entrenamiento Phantom , yo era parte del equipo que participó activamente en su creación. Junto con otros atletas, probamos una amplia variedad de prototipos, los mejoramos, los rechazamos, los optimizamos aún más y los optimizamos. Fue un proceso largo y muy cuidadoso hasta que finalmente tuvimos un producto que cumplía con nuestras ideas y necesidades, la máscara de entrenamiento Phantom tal como la conocemos hoy en día.

¿Qué pensaste cuando lo tuviste en tu mano por primera vez?

Roland Aicher: Muy genial. De ninguna manera engorroso, pero finalmente una herramienta útil de esta categoría para optimizar aún más mi entrenamiento. Por supuesto, la “bauticé” con una sesión de formación inicial inmediatamente después de recibirla.

¿Cómo hiciste para aumentar la intensidad?

Roland Aicher: Por supuesto, lo probé al principio, pero luego pasé de la intensidad 1 con bastante rapidez. Ahora entreno al menos en 3, pero a menudo también en 4, aunque eso siempre depende un poco de mi estado de ánimo actual.

¿Cuál es tu entrenamiento favorito con ella?

Roland Aicher: Los uso en prácticamente todo tipo de entrenamiento, ya sea de resistencia o de calentamiento. También disfruto mucho usándolos para una variedad de ejercicios combinados, fitness funcional o remo.

¿Tu experiencia “más intensa” con la máscara de entrenamiento Phantom fue...?

Roland Aicher: ...en varios circuitos de ejercicios combinados que me desafían mucho en términos de circulación. A veces tenía la sensación de que no podía seguir el ritmo de las sibilancias y tenía pequeños ataques de pánico. Pero esto también se puede solucionar fácilmente si te mantienes tranquilo y sereno. Este también es un buen entrenamiento.

¿Cómo te beneficias de la máscara de entrenamiento Phantom ?

Roland Aicher: Utilizo mucho más volumen pulmonar. Mis músculos respiratorios se han vuelto más fuertes y más eficientes. Como resultado, mi rendimiento ha aumentado enormemente y tengo mucha mejor resistencia. Ya no me quedo sin aliento tan fácilmente. Todo ello hace posible una formación mucho más intensiva.

Esto lo noté especialmente en el XLETIX Challenge 2017 en Kühtai. Quiero decir, ya tengo 46 años y he pasado por varias lesiones. Cuando un amigo mío me preguntó si quería unirme a su equipo, dije que sí, pero no tenía idea de en qué me estaba metiendo.

Y tengo que decir que sin mi entrenamiento previo con la máscara de entrenamiento Phantom , no habría podido completar la carrera, especialmente durante este tiempo o sin estar exhausto durante los días posteriores. Nunca antes en mi vida había corrido 10 millas seguidas, aunque algunas personas podrían reírse de eso ahora. Para ser honesto, nunca he sido corredor. Simplemente no es divertido para mí correr constantemente por una ruta determinada. Nunca pude acostumbrarme a eso. A esta distancia se sumaba, por supuesto, la altura y los 25 obstáculos, cada uno de los cuales era un desafío extremo.

Pero como había entrenado con la máscara de entrenamiento Phantom casi todos los días durante 8 meses antes, correr fue relativamente fácil para mí. Por respeto a todo esto, comencé muy lentamente, mentalmente ya había renunciado a mi papel entre los últimos equipos y al final logré remontar a mi equipo desde atrás. No habría podido hacer esto sin la máscara de entrenamiento Phantom . Esto también significó que no tuve que prepararme mucho para la carrera y el agotamiento se mantuvo al mínimo.

 

¿Notas también un aspecto de entrenamiento mental?

Roland Aicher: Como ya se mencionó, estos pequeños y ocasionales ataques de dificultad para respirar también ayudan a desarrollar resistencia mental. Esto también te ayuda en la batalla. Ya no haces tapping tan rápido cuando un oponente te tiene fuertemente agarrado, sino que continúas intentando escabullirte, sabiendo que puedes arreglártelas con menos aire.

¿El “mejor” comentario que has oído sobre la máscara de entrenamiento Phantom ?

Roland Aicher: Alguien quiso insultarme y me preguntó qué tipo de máscara SM llevaba. Pero siempre hay gente ignorante.

¿Qué le dirías a alguien a quien no le convence en absoluto el concepto de Phantom Training Mask?

Roland Aicher: Primero deberías probar todo, eso es lo que le digo a la gente en mi estudio o les ofrezco que lo prueben con mi máscara de entrenamiento Phantom . Sólo entonces podrás realmente formarte una opinión. Pero también es importante que le des una oportunidad a la máscara de entrenamiento Phantom . Como ocurre con todo lo demás, después de unos 10 minutos de entrenamiento no puedes decidir si es eficaz para ti. Como cuando realmente quieres lograr el éxito con ello. Simplemente no es suficiente entrenar una o dos veces por semana durante un máximo de 15 minutos. Para tener éxito, primero debes esforzarte intensamente; de ​​lo contrario, no llegarás a ninguna parte. Este principio se aplica no sólo al deporte, sino a todo en la vida. Si quieres algo, tienes que trabajar por ello.

 

 

¿Cuál es tu próximo objetivo?

Roland Aicher: Como ya mencioné, en realidad soy un poco mayor para pelear mis propias peleas, pero por supuesto me interesaría volver a pelear una o dos peleas. En cualquier caso, seguiré siendo leal a las artes marciales, ya sea sobre o dentro del ring.

 

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